Todos sabemos que en los países con menos horas de sol hay mayor tasa de suicidio estrés y depresión. En España lo vivimos de una forma drástica con la llegada del otoño.
La variación de horas de luz aumenta melatonina y disminuye la serotonina y dopamina, este mecanismo, tiene consecuencias sobre el estado de ánimo. Es el responsable de que en torno al 30% de la población sienta, tristeza, desconcentrados, irritabilidad, falta de energía, trastornos del sueño y alimentarios…por ello es vital que nos dé el solecito, más allá de estar morenitos y guapos. Para absorber una de las vitaminas más valiosas, mejorando así la salud general y la mente en particular.
Vivimos en un país con un clima y entorno natural envidiable, sin embargo, pasamos más horas en el sofá que en los parques, ¿y nuestros niños? Pegados a la tv o a los ipad o consolas.
Antes salíamos del colegio deseando tirarnos por el césped, correr por la plaza, jugar a las canicas, patinar… las largas horas de recreos saltando a la comba se han relegado por pantallas y sedentarismo. Las mamás se sentaban a comer pipas y nosotros jugábamos horas y horas al aire libre, ahora las mamás están demasiado ocupadas, la maternidad se hace cada vez mas ardua y nos vemos obligados a buscar soluciones “fáciles”.
Pero que no son saludables ni para nosotros ni para nuestros hijos. Tampoco lo son para nuestros mayores. Niños y adultos sanos y felices. Hay diversos estudios que demuestran que la falta de Vitamina D se asocia con un mayor riesgo de depresión, perdida de memoria y enfermedades relacionadas con el sistema nervioso.
Los resultados muestran que las personas de edad avanzada con un nivel sérico por debajo de 50 nmol / L tienen un riesgo significativamente mayor de depresión que los de su mismo grupo de edad con un nivel sérico de 50 nmol/L.
La deficiencia en Vitamina D puede contribuir al desarrollo y exacerbación de varios tipos de cáncer y trastornos psiquiátricos. Además de estar estrechamente ligada al cerebro, entonces no sería lógico suplementarse con ella? especialmente a niños, embarazadas y ancianos. Por supuesto fundamental sacarlos de las residencias y de las clases al menos 2 horas al día.
El problema es el estilo de vida moderno, de casa al trabajo y viceversa, es más fácil perder el tiempo libre frente a la tv que haciendo algo productivo al aire libre. Una vida sedentaria que se convierte un bucle de retroalimentación negativa. Vivimos literalmente encerrados, ¿sabéis lo que significa depresión? del latín depressio, que significa ‘opresión’, ‘encogimiento’ o ‘abatimiento’, es una de las psicopatologías de moda en el mundo moderno, un trastorno del estado de ánimo, transitorio o permanente, sentimientos de infelicidad y culpabilidad, junto a una incapacidad de disfrutar del día a día, cada persona lo vive a su manera pero sin duda todo tiene un inicio emocional/fisiológico.
El ritmo del día a día, la ansiedad, la frustración, estrés psicosocial, el dolor crónico, la mala alimentación, intolerancias alimentarias, la exclusión social, los problemas económicos, sedentarismo, obesidad, tabaquismo, sueño, diabetes, hipotiroidismo entre otros nos llevan a sentirnos deprimidos pero también se aumenta este sentimiento con la deficiencia de vitamina D.
Es importante curar la mente así como el cuerpo. La flora intestinal es clave en la depresión, por ello la vit D y los probióticos tienen un efecto curativo sobre la depresión. A nivel mundial, más de 300 millones de personas sufren de depresión y el número va en aumento, esto genera cambios fisiológicos muy negativos, que nos llevan a enfermedades o patologías que nos hacen sentir mal físicamente y eso nos hace estar peor psicológicamente y vuelta a buscar consuelo en fármacos o alcohol o drogas o en la comida basura. Todo ello esta completamente falto de nutrientes de calidad, algo que empeora la permeabilidad intestinal y con ello nuestra salud física y emocional, recordemos que el intestino produce el 90% de la serotonina.
Yo propongo salir de este bucle tan negativo. Nadar contra corriente, ser una buena influencia para vuestro entorno, que os dé el sol, es importante tener vida social, sentirse útil y valorado, quedar con amigos para ir a correr a patinar, quedar para hacer una barbacoa o un brunch, cocina en familia recetas sanas, enseñad a vuestros hijos buenos hábitos y retomar viejas costumbres como ir a la playa a comer la tortilla de patatas, alimentarnos bien con alimentos reales que crecen bañados por la luz del sol, mantenerse activos física y mentalmente, ¡sonreíd a la vida!