¿Alguna vez has tenido una corazonada, como un sexto sentido?
Los chakras son centros de energía en forma de rueda distribuidos por todo el cuerpo que afectan el bienestar y la percepción. El chakra del tercer ojo, también conocido como Ajna, es el sexto chakra del cuerpo. El Tercer Ojo está relacionado con la glándula pineal o hipófisis, una pequeña glándula, muy importante, situada en el mismo centro del cerebro y que regula varias funciones corporales.
Es un concepto místico que se refiere a un ojo invisible que proporciona la percepción más allá de la vista ordinaria. En ciertas tradiciones espirituales dhármicas como el hinduismo, el tercer ojo se refiere al ajna, o ceja.
El tercer ojo se refiere a la puerta que lleva dentro de los reinos interiores y los espacios de la conciencia superior. Es una glándula que aún guarda muchos secretos pues cada día se descubren nuevas funciones, inclusive las que tienen que ver con la luz y la oscuridad. Es la glándula que en la evolución hemos ido desarrollando desde animales como los peces entre otros.
Entre sus cualidades más interesantes está el que segrega cierto compuesto químico a la hora del nacimiento y de la muerte, el DMT, la misma sustancia que se obtiene del ayahuasca. La glándula pineal es del tamaño de un guisante con forma de cono, ubicada en el cerebro de los vertebrados cerca del hipotálamo y la glándula pituitaria. Es una herramienta venerada de videntes y místicos y se considera el órgano de la conexión universal suprema.
El chakra del tercer ojo está relacionado con:
-Claridad
-Concentración
-Imaginación
-Intuición
-Percepción espiritual
-Conexión universal
¿Cómo desarrollar nuestro tercer ojo?
Necesitareis unos 20’ diarios sin fallar un solo día, si queréis sentir su efecto. Podéis empezar con menos tiempo e ir aumentando con el paso de los días. Personalmente, os recomiendo hacerlo al amanecer o antes de dormir, así será vuestro momento de meditación y de conexión con vosotros mismos.
Para meditar, el entorno es fundamental. Limpio, ordenado, relajado, sin ruidos, luces ni personas; apartaos de toda distracción.
Siéntate cómodo en loto o con las piernas cruzadas y las manos sobre las rodillas en una posición de relajación y meditación. Respira profundamente diez veces por la nariz, inhalando completo y exhalando suave, respiración completa básica pero suave sin ser forzada. Una vez exhalado el décimo aire, cierra los ojos y mira hacia ese punto centrado de tu frente con los ojos cerrados, focus sobre el tercer ojo.
Concéntrate en la imagen de tu Tercer Ojo abierto y bajo la forma de un triángulo, continuando siempre con una respiración abdominal. Si se te pasan pensamientos por tu mente, no los sujetes, déjalos pasar sin retenerlos y vuelve a la visualización del Tercer Ojo continuando con la respiración profunda.
Repetir mantras o visualizar una imagen también pueden ayudarte a concentrarte. Imagina que de ese Ojo salen tiras de color amarillo, cordones de luz que se van esparciendo por todo tu cuerpo. Esto empezará a tranquilizarte, relajarte, y podrás sentir una energía diferente; esta será la imagen.
Trata de estar en este estado al menos 15’. Después lávate la cara y frente al espejo repite: “Soy suficiente” “Puedo controlar mis emociones” “Soy consciente de mi fuerza, de mi potencial” “Mis ojos no siempre me muestran mi imagen real, los espejos no siempre reflejan lo que soy” “Puedo superar cualquier obstáculo” “Soy preciosa tal como soy” “El entorno no puede determinar quién soy” “Dejo de castigarme para mimarme y respetarme”.
Las meditaciones sirven para reconducir malas conductas, en este caso dejar atrás la inseguridad y el dolor que a veces nos provocamos nosotros mismos. Podéis crear vuestros propios mantras en función a vuestras necesidad, pero no dejéis de repetirlos, recordad que la fuerza de vuestras palabras y pensamientos puede ser demoledora.
Complementa tu dieta
Alimentos que apoyan a su desarrollo:
1. Cacao crudo
2. Bayas de Goji
3. Ajo
4. Limón
5. Sandía
6. Anís estrellado
7. Miel
8. Aceite de coco
9. Semillas de cáñamo
10. Cilantro
11. Ginseng
12. Vitamina D3
Todos estos son ingredientes que ayudan a la purificación de la glándula pineal.
Aplicar aceites esenciales
Los aceites esenciales son herramientas dinámicas para curar y abrir la glándula pineal, y facilitan los estados de conciencia espiritual.
Jazmín, limón, sándalo.
Mezcla para tercer ojo: Uno o varios de los aceites citados. Compra un porta aceite. Cogerás un aceite base (Sesamo, coco, almendra…) NUNCA usar aceites esenciales directamente sobre la piel. Por cada 6 gotas de aceite esencial, son 10-15gr de aceite base. Lo mezclas y usas unas gotitas en tu tercer
Cantar “Om” mientras aplica el aceite puede mejorar el efecto.
Nota: Algunos aceites esenciales, especialmente los aceites cítricos como el limón, pueden causar fotosensibilidad. Evita la exposición al sol después de aplicar aceites esenciales cítricos en la piel.
Piedras y gemas
Cristales y piedras preciosas en la paleta de colores púrpura, índigo y violeta. Esta paleta de colores sirve para despertar, equilibrar, alinear y nutrir el tercer ojo
Covington recomienda los siguientes cristales para la activación del tercer ojo:
1. Amatista
2. Zafiro púrpura
3. Turmalina violeta púrpura
4. Rhodonita
5. Sodalita