¿MEJOR CROSSFIT, SALA O CLASES COLECTIVAS?
por Christy Repetto, para la comunidad de Etenon Fitness
Mucho se habla de elegir entre la sala de musculación, las actividades dirigidas o entrenamientos como el CrossFit. Como si el cuerpo tuviera que alinearse con una sola tribu. Como si disfrutar de entrenar significara renunciar a todo lo demás. Y aquí va mi opinión: no tienes que elegir, tienes que integrar.
Porque entrenar bien no es cuestión de modas ni etiquetas. Es cuestión de objetivos, necesidades y, sobre todo, sostenibilidad. Así que vamos a romper esa barrera mental y a diseñar una estrategia que realmente potencie tu cuerpo y tu bienestar.
ENTRENA CON UN OBJETIVO, NO SOLO POR RUTINA
No hay motor más potente que una meta clara. Ya sea quitarte esos dolores de espalda, bajar de peso, correr tu primera carrera o simplemente tener más energía para tu día a día. Si sabes por qué entrenas, sabrás cómo hacerlo. Y cuando la motivación flojee, ese “por qué” será tu brújula. Tu entreno no necesita ser perfecto, solo necesita tener sentido para ti.
DEJA QUE TE GUÍEN (NO, NO ES DE DÉBILES)
Un entrenador no está para gritarte ni para marcarte repeticiones. Está para escucharte, adaptar, proteger, motivar. Una buena entrevista inicial permite conocerte, entender tu nivel y tus preferencias. Y con eso, se puede trazar un plan híbrido: tal vez un día en sala, otro de circuito, una clase colectiva el viernes. Todo puede convivir si responde a una estrategia. Confía: nadie triunfa solo en esto.
PRUEBA, EQUIVÓCATE, DESCUBRE
¿Te da miedo entrar en una clase de body pump o de cycling? ¿Te da pudor probar un WOD por primera vez? Hazlo igual. Las clases dirigidas son una joya: la energía del grupo te levanta, la música te lleva y el instructor te cuida. Prueba estilos diferentes: desde fuerza con barra hasta clases cuerpo-mente. Solo así descubrirás lo que realmente te enciende.
Y sí, ese subidón postclase compartido es real. El cuerpo vibra más cuando se siente parte de una manada.
CONÓCETE EN LA SALA
El entrenamiento individualizado en sala es tu espacio sagrado. Ahí eres tú contra ti. Conoces tu cuerpo, controlas los tiempos, ajustas cargas. Familiarízate con el equipamiento: máquinas, zona de peso libre, cardio, espacio funcional. Pregunta, curiosea, aprende. Cuanto más sepas, más aprovecharás. Y la gran ventaja: la sala está disponible a tu ritmo, sin depender del horario de una clase.
LA COMBINACIÓN ES LA CLAVE
No hay semana perfecta. Hay semanas posibles. Si un día no llegas a tu clase favorita, no abandones. Usa el tiempo para una sesión de core, o haz cardio suave. Alterna fuerza y movilidad. Suma equilibrio. Recuerda que las cualidades físicas se complementan: fuerza, resistencia, flexibilidad, coordinación. Lo ideal es que tu planificación sea variada y adaptable, como tú.
¿Te gusta bailar o correr? Genial. Entonces entrena el tren inferior con carga. ¿Prefieres yoga o pilates? Súmale algo de cardio o trabajo funcional. Así potencias lo que amas y previenes lo que podría lesionarte.
Tu rutina no tiene por qué ser rígida, ni tu entrenamiento tiene que parecerse al de nadie. Lo que importa es que construyas una versión de ti que te haga sentir fuerte, libre y viva.
¿CrossFit, sala o clases dirigidas? Yo me quedo con una cuarta opción: tu cuerpo como templo y el movimiento como lenguaje.
Nos vemos en el box, en la sala… o donde quieras retarte hoy. ¡Tú eliges el escenario, nosotros ponemos las herramientas! Entra en la web de etenon fitness y encuentrea todo lo que necesitas.