Construye una buena conducta alimentaria con tus hijos, será determinante en su salud física y mental.
Mi primer consejo, debería ser un mantra para ti: NO OBLIGAR.
Igual que somos diferentes los adultos, también lo son los niños, cada uno con sus gustos y apetitos. Escucha a tu hijo. Obligar a un niño a terminarse la comida, es obligarle a comer más de lo que necesita, además de crear un ambiente de tensión muy desagradable que os desgasta a ambos.
Comer no puede ser un castigo. Además, le restas autonomía y personalidad. Obligar a comer genera problemas de sobrepeso o TCA en un futuro.
1. Crea un ambiente agradable
Sin gritos ni amenazas, ni ruidos estridentes. Ambiente agradable, ordenado y limpio.
2. Para los malos comedores
¡Sírvele lo que necesita en función de su edad! Usa un plato grande, de este modo, percibirá que hay poca cantidad de comida dentro de su plato.
3. Fomenta su autonomía
Puede motivarle poner la mesa, dejar que él mismo se sirva, que cocine contigo…
4. Enséñale a comer en familia
Siempre que puedas, comer en familia, le ayudará a crear buenas conductas.
5. Fomenta la alimentación equilibrada
Permitirle escoger su menú. Dale una oferta y explícale las funciones de cada alimento.
6. Evita las tonterías
La hora de la comida tiene un lugar, un tiempo y un fin claro y necesario. Ni juegos, ni distracciones, ni exquisiteces.
Muy pronto lanzaré cursos para entender y trabajar la psicología y conducta de los más pequeños. Mientras tanto, te recomiendo leer a Carlos González, ¡mis formaciones con él han sido increíbles!